Manuela y su pareja se tuvieron que mudar de Madrid a Turín por motivos de trabajo. Hoy nos cuenta qué tal fue su experiencia de mudanzas.
Nos tuvimos que mudar a otro país por motivos de trabajo de mi marido. A pesar de que una mudanza internacional es algo que genera siempre mucho estrés y preocupación, la experiencia ha sido muy positiva. Claramente al principio tuvimos muchísimas dudas a nivel de cómo organizar la mudanza. De hecho no teníamos claro cuántos y cuáles muebles nos íbamos a llevar. Nuestra intención era intentar vender lo más posible pero finalmente nos tuvimos que quedar con muchas cosas así que tuvimos que tener en cuenta las compañías que nos ofrecían más volumen para quedarnos tranquilos.
El proceso de búsqueda de la compañía nos llevó varias semanas ya que tuvimos que valorar varios presupuestos y diferentes tipos de servicios ofrecidos. Para nosotros era fundamental que la compañía ofreciera, además del transporte, servicio de recogida con embalaje, desmontaje de muebles y montaje final en el destino y que todo eso no superara el límite que nos habíamos fijado. Tras varias valoraciones de los metros cúbicos que necesitábamos, optamos finalmente para la compañía que nos ofreció el mejor precio pero que al mismo tiempo nos generaba mucha confianza por haber casi exclusivamente reseñas positivas.
El día de la mudanza fue todo fenomenal. Los encargados llegaron puntuales. Eran tres y empezaron uno por la cocina y los otros dos por el salón . Fueron avanzando de habitación en habitación muy rápidos. Nosotros también hicimos alguna caja, y en unas cinco-seis horas terminamos todo. Debo de decir que todo funcionó muy bien pero si tengo que encontrar una pega es que las cajas hechas por nosotros eran más homogéneas en el contenido y me preocupaba de detallar bien el contenido en el exterior mientras que en las otras se diferenciaban por habitación pero he encontrado un poco de todo y a la hora de buscar algo en concreto me ha costado a veces encontrarlo.
Lo que aconsejo y que he intentado yo misma hacer es ponerse a hacer una selección previa de todo lo que hay que llevar y aprovechar para tirar o separar lo que no necesitamos. De hecho, en algunas habitaciones no llegué a hacer esta selección, por ejemplo en la cocina, y finalmente en las cajas terminó de todo, incluido cosas que no necesitaba y hubiera querido tirar. En segundo lugar, aconsejo ir preparando algunas cajas antes del día de la mudanza con cosas que se quieren organizar de una determinada manera para que luego no se mezcle todo. Por ejemplo yo preparé las cajas con mi ropa ya divididas según las estaciones, para luego tenerlo más fácil.
Manuela se mudó de Madrid a Turín con los servicios de City Movers Mudanzas. La empresa fue valorada con 5/5 estrellas e indicando su rapidez y profesionalidad.