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A.C.
27 febrero, 2024
en Sirelo
Malas personas con buenas palabras
Una mudanza está considerada en el top 5 de los momentos más estresantes de nuestra vida.
Este fin de semana pasado nos mudábamos. Después de cuatro meses de reforma y con la casa ya casi del todo preparada habíamos contratado la mudanza con [Nombre eliminado por Sirelo], uno de los varios que fueron a ofrecernos presupuesto viendo la casa.
Cuando estuvo en casa haciendo el presupuesto se le llenaba la boca de lo bien que trabajaban y de todo el tiempo que llevan en el sector.
Que si iban a venir cuatro profesionales, que si iban a forrar el ascensor con cartón para no molestar, que si ellos tenían que embalar lo frágil porque, si no, no se responsabilizaban. Que sí claro, que nos dejaban los muebles montados y colocados. Incluso los soportes de las televisiones, si no eran de pladur nos los dejaban puestos. No teníamos que preocuparnos más que de llenar las 60 cajas que ellos nos dejaban con cosas que no fueran frágiles, porque las frágiles las embalaban ellos que solo así se hacían responsables del contenido.
Nos cobró 300 euros a cuenta. El presupuesto por todo, cajas y todo montado fue de 580 más IVA.
A los dos días llamó y pretendió cobrarnos las cajas a un euro cada uno, acordamos a 0.40 y le dijimos que no era lo que habíamos hablado, pero bueno.
Quedamos el viernes a las 8:30 de la mañana, a las 9:20 les llamamos porque no habían llegado y nos dijeron que en 10 minutos estaban, que había mucho tráfico. OK.
Vinieron tres personas, no cuatro. El mueble que les dijimos que era más complicado les costó y a la hora de comer aun no habían terminado de cargar.
Decidieron hacer un primer viaje para ir montado en la casa nueva mientras terminaban de cargar en la anterior y se fueron a comer. Acordamos unos 40 minutos.
Nosotros también, y nos llamaron a los 30 minutos que ya está en la nueva dirección.
Para allá que fuimos para llegar y verlos con los bocatas. Esperamos a que terminaran los bocatas para poder seguir después de haber terminado (nosotros) de comer deprisa y corriendo.
Empiezan a subir las partes de los dos muebles que hay que montar y las cajas que había en el camión.
Resulta que no han traído los tornillos del canapé ni el mueble cama entero, por lo que tienen que volver a por ello y a cargar el resto de las cajas sin haber descargado el camión en su totalidad.
Empezamos a ordenar algunas cajas y vemos que lo frágil no está bien embalado, que las botellas las han metió en una caja CON UNA DE NUESTRAS ALMOHADAS sin ningún tipo de plástico ni nada, para que no se rompan, que todo el material electrónico está mezclado de cualquier manera con herramientas y con lo que hubiera cerca, que los adornos están en cajas sin ningún tipo de cuidado (tienes fotos más abajo).
La ropa la iban a transportar en cajas ropero todo colgado para volver a colgarlo en los armarios, vemos que varias cajas han venido boca abajo con toda la ropa amontonada en el fondo.
Los fallos se acumulan y está claro que hemos cometido un error enorme al contratar a esta gente.
A las 8 de la noche aún no habían vuelto a la casa nueva, donde llegan a las 8:30 (11 horas después de empezar la mudanza, una hora tarde) y con el montaje de los muebles pendientes.
A las 9 de la noche llegan tres trabajadores más, entre ellos el jefe, deshaciéndose en disculpas.
A las 11:30 (14 horas después de empezar la mudanza) y después de haber vuelto yo a la casa antigua a por un cable que les hacía falta a ellos, nos dicen que no pueden terminar de montar el mueble porque la parte eléctrica que iban a hacer no se puede hacer (al día siguiente conseguimos que venga un montador que efectivamente monta el mueble, incluida la parte eléctrica con el cable que había). Les digo que ya está bien, que se vayan, en pocas palabras, 14 horas después de empezar la mudanza les echo, y encima les tengo que ayudar a subir las cajas que faltan durante media hora más.
Le digo al jefe [Nombre eliminado por Sirelo] que está todo fatal, le he enseñado las cajas con las cosas frágiles y como NO están embaladas. Me pide el resto del pago, y le digo que no, que ya le informaré de todo lo que está roto a ver cuanto me tiene que pagar su seguro, que dice que tiene, pero que, visto lo visto, no sé si es cierto.
Lo que sí que es cierto es que tuve que volver a la casa antigua a por un armario entero que se habían “olvidado” de traer, para encontrarme con que tampoco habían embalado y traído los platos y los vasos. Dos gavetas enteras con toda la cristalería y todo lo frágil.
Ya pasa de falta de profesionalidad a qué les dé igual y a ahorrarse trabajo.
Yo no estaba avisado, tú ya lo estás.
Cuidado con las buenas palabras y la amabilidad de los malos profesionalesLeer más
Una mudanza está considerada en el top 5 de los momentos más estresantes de nuestra vida.
Este fin de semana pasado nos mudábamos. Después de cuatro meses de reforma y con la casa ya casi del todo preparada habíamos contratado la mudanza con [Nombre eliminado por Sirelo], uno de los varios que fueron a ofrecernos presupuesto viendo la casa.
Cuando estuvo en casa haciendo el presupuesto se le llenaba la boca de lo bien que trabajaban y de todo el tiempo que llevan en el sector.
Que si iban a venir cuatro profesionales, que si iban a forrar el ascensor con cartón para no molestar, que si ellos tenían que embalar lo frágil porque, si no, no se responsabilizaban. Que sí claro, que nos dejaban los muebles montados y colocados. Incluso los soportes de las televisiones, si no eran de pladur nos los dejaban puestos. No teníamos que preocuparnos más que de llenar las 60 cajas que ellos nos dejaban con cosas que no fueran frágiles, porque las frágiles las embalaban ellos que solo así se hacían responsables del contenido.
Nos cobró 300 euros a cuenta. El presupuesto por todo, cajas y todo montado fue de 580 más IVA.
A los dos días llamó y pretendió cobrarnos las cajas a un euro cada uno, acordamos a 0.40 y le dijimos que no era lo que habíamos hablado, pero bueno.
Quedamos el viernes a las 8:30 de la mañana, a las 9:20 les llamamos porque no habían llegado y nos dijeron que en 10 minutos estaban, que había mucho tráfico. OK.
Vinieron tres personas, no cuatro. El mueble que les dijimos que era más complicado les costó y a la hora de comer aun no habían terminado de cargar.
Decidieron hacer un primer viaje para ir montado en la casa nueva mientras terminaban de cargar en la anterior y se fueron a comer. Acordamos unos 40 minutos.
Nosotros también, y nos llamaron a los 30 minutos que ya está en la nueva dirección.
Para allá que fuimos para llegar y verlos con los bocatas. Esperamos a que terminaran los bocatas para poder seguir después de haber terminado (nosotros) de comer deprisa y corriendo.
Empiezan a subir las partes de los dos muebles que hay que montar y las cajas que había en el camión.
Resulta que no han traído los tornillos del canapé ni el mueble cama entero, por lo que tienen que volver a por ello y a cargar el resto de las cajas sin haber descargado el camión en su totalidad.
Empezamos a ordenar algunas cajas y vemos que lo frágil no está bien embalado, que las botellas las han metió en una caja CON UNA DE NUESTRAS ALMOHADAS sin ningún tipo de plástico ni nada, para que no se rompan, que todo el material electrónico está mezclado de cualquier manera con herramientas y con lo que hubiera cerca, que los adornos están en cajas sin ningún tipo de cuidado (tienes fotos más abajo).
La ropa la iban a transportar en cajas ropero todo colgado para volver a colgarlo en los armarios, vemos que varias cajas han venido boca abajo con toda la ropa amontonada en el fondo.
Los fallos se acumulan y está claro que hemos cometido un error enorme al contratar a esta gente.
A las 8 de la noche aún no habían vuelto a la casa nueva, donde llegan a las 8:30 (11 horas después de empezar la mudanza, una hora tarde) y con el montaje de los muebles pendientes.
A las 9 de la noche llegan tres trabajadores más, entre ellos el jefe, deshaciéndose en disculpas.
A las 11:30 (14 horas después de empezar la mudanza) y después de haber vuelto yo a la casa antigua a por un cable que les hacía falta a ellos, nos dicen que no pueden terminar de montar el mueble porque la parte eléctrica que iban a hacer no se puede hacer (al día siguiente conseguimos que venga un montador que efectivamente monta el mueble, incluida la parte eléctrica con el cable que había). Les digo que ya está bien, que se vayan, en pocas palabras, 14 horas después de empezar la mudanza les echo, y encima les tengo que ayudar a subir las cajas que faltan durante media hora más.
Le digo al jefe [Nombre eliminado por Sirelo] que está todo fatal, le he enseñado las cajas con las cosas frágiles y como NO están embaladas. Me pide el resto del pago, y le digo que no, que ya le informaré de todo lo que está roto a ver cuanto me tiene que pagar su seguro, que dice que tiene, pero que, visto lo visto, no sé si es cierto.
Lo que sí que es cierto es que tuve que volver a la casa antigua a por un armario entero que se habían “olvidado” de traer, para encontrarme con que tampoco habían embalado y traído los platos y los vasos. Dos gavetas enteras con toda la cristalería y todo lo frágil.
Ya pasa de falta de profesionalidad a qué les dé igual y a ahorrarse trabajo.
Yo no estaba avisado, tú ya lo estás.
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